Si algo caracteriza Budapest son sus dos caras: la invernal y la primaveral veraniega. Si en la primera la vida tiende a hacerse de puertas hacia adentro, todo cambia con la llegada del buen tiempo. Los primeros rayos cálidos de sol impulsan a los habitantes de Budapest la capital magiar a las calles, a las terrazas que abren sus espacios modificando la mirada sobre la ciudad.
Estas terrazas, estos Kerts, no son simplemente mesas en un calle. Muchas de ellas son auténticos oasis en pleno centro de Budapest, la mayor parte de ellas suelen abrir en torno al mes de abril, cerrando a mitad o finales de septiembre. En la mayoría de los casos, son los espacios de verano de establecimientos que abren todo el año.
Muchos de ellos se ubican en torno al centro de Budapest, destacando las siguientes áreas:
- Kazinsky utca: en esta calle del barrio judío encontramos muchos de estos paraísos, cabe destacar el Mika Kert, terraza de verano del pub con el que comparte nombre. Ellátó Kert, en este caso cuenta con billar, mesas de pin pon, futbolines, comida mexicana,… Köleves, en este caso se trata de una terraza en la que disfrutar tanto de una cerveza, una copa o un vino como de la cocina “koser”.
- Holdudvar – “El patio de la luna”: con este sugerente nombre nos encontramos esta terraza, este kert, en plena isla Margarita. El entorno es muy agradable, aunque quizás pueda estar demasiado lleno ciertas noches. La música no es su fuerte, pero el entorno merece al menos una visita.
- Kerts en algunos de los pubs más conocidos: los bares más populares también cuenta con sus terrazas de verano, en muchos casos cubiertas durante el invierno. Algunas de las más destacadas son el Szimpla Kert, en Kazincy utca 14; el Fogasház, en Akácfa utca 51; la de Corvintető, en Blaha Lujza tér 1 – 2; Dürer Kert, en Ajtósi Dürer sor 19-21; Gondozó, en Vajdahunyad utca 4,…
Cabe destacar una curiosa costumbre, en muchas de las terrazas encontraremos unas mantas en el respaldo de las sillas. El objeto no es otro que cubrirnos si las temperaturas bajan pero sigue siendo muy agradable y nos apetece estar fuera, una gran idea.
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